Título: OUT
Autora: Natsuo Kirino
Año de publicación: 1997 (2008 en España)
Género: Novela Negra, Intriga
Acabo de terminar esta novela, y tengo muchos sentimientos encontrados por así decirlo. De entrada decir que es una novela del género negro, o negrísimo. Diferente, escalofriante y cruel en muchos pasajes, la autora consigue que sus casi quinientas páginas te atrapen y no puedas parar de leer. No se hace pesada y es muy ágil, debido a lo bien escrita que está.
Kirino traza un retrato de la sociedad japonesa actual, y transmite una mirada descarnada, como una crítica implícita por parte de la autora, desmitificando un poco la visión de la sociedad nipona. Así, trata temas como la importancia de un buen físico y de la juventud en detrimento de las personas mayores, la superficialidad en muchos aspectos de la vida, o la voracidad por el dinero y el éxito fácil de algunas personas. Dichos temas los vemos claramente en los personajes que protagonizan el libro.
La novela está protagonizada básicamente por cuatro mujeres, hechas a sí mismas y todas ellas con problemas personales y familiares, que reflejan la gran soledad en la que se encuentran.
El encargo que reciben por parte de una de ellas de deshacerse del cadáver de su marido, y las situaciones que esta acción desencadenará, las sitúa al límite de lo que un ser humano debe o no debe hacer. Sin embargo, es muy sorprendente cómo resuelven conflictos y dilemas de gran calado y repercusión, con una lógica fácil y aplastante. En concreto, me ha sorprendido Masako, la serenidad y naturalidad con la que hace frente a situaciones espeluznantes... Y es que hay momentos del libro realmente escalofriantes y que hacen poner la piel de gallina.
El libro está increíblemente bien ambientado, con descripciones sencillas y concisas, pero muy bien construidas; el ambiente de la fábrica donde trabajan, sus barrios, costumbres y hogares son muy realistas y evocadores, trasladándote fácilmente a la trama y su contexto.
Y si tengo que ponerle un pero... sería el final. Sorprendente, pero para mí, no acaba de estar a la altura de la trayectoria del libro y de la trama.
Leer una novela diferente, y a veces peculiar, siempre es bueno. Esta en concreto tiene mucha calidad, está bien ambientada y bien escrita. Empatizas con los personajes, llegas a notar el pánico que sienten, e incluso te conmueven. Grande el personaje de Masako, luchadora, inteligente y dura a la vez.
Nunca he leído ninguna novela oriental. Tomo nota!!!!!
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