El último verano de Silvia Blanch, Lorena Franco

Ficha técnica

Autora: Lorena Franco

Editorial: Editorial Planeta (clica para ir a la web de la editorial)
Año de publicación: 2020
Número de páginas: 318
Género: Novela negra

Sinopsis de El último verano de Silvia Blanch 

Un amor prohibido siempre arrastra mentiras.
Un crimen siempre deja huellas.

La última persona que vio a Silvia Blanch, desaparecida sin dejar rastro el verano de 2017, está muerta. Silvia era joven, guapa y estaba destinada al éxito. Alex, una joven periodista, será la encargada de ir hasta el pueblo de Montseny, donde vivía Silvia y donde se le perdió la pista, para hablar con su familia y escribir un artículo cuando se cumple un año de la desaparición.
Una vez allí, empieza a desempolvar todos los detalles de la desaparición en busca de respuestas. Rodeada de secretos y mentiras, no tardará en notar que su presencia molesta a los habitantes del pueblo. Sobre todo a uno de los principales sospechosos, por quien Alex se sentirá irremediablemente atraída a pesar de lo que parece esconder.

Impresiones 

Esta lectura ha sido mi primer contacto con la escritora barcelonesa Lorena Franco, autora de otros títulos como La viajera del tiempo o Ella lo sabe, que se ha atrevido con varios géneros. No sé qué tal se le dan los demás, pero este género ya os digo que lo borda.

El libro gira en torno a la desaparición de la joven Silvia Blanch. Una noche de verano su coche apareció abandonado en la cuneta, a los pies del bosque, un poco antes de llegar a su pueblo, Montseny. Una vecina que pasaba entonces por allí conduciendo fue la última que la vio con vida tras los árboles, a ella y a alguien más, pero nunca pudo confirmar de quién se trataba. Ahora un año después de su misteriosa desaparición, la periodista Alex Duarte, del periódico Barcelona ahora, es enviada al pueblecito de Montseny, muy cercano a Barcelona pero a la vez tan lejos y tan diferente, ya que allí se respira aire puro y las montañas, bosques y vegetación lo hacen un lugar idílico. Pues bien, Alex es enviada para entrevistar a la familia de Silvia con motivo del primer año de su desaparición. Pero Alex no será precisamente bienvenida. Prácticamente a nadie en el pueblo le hace gracia su presencia como periodista. Desde Montse, la propietaria del hostal, pasando por Jan, el primo conflictivo y misterioso de la desaparecida, hasta los jubilados que cada tarde van a jugar a las cartas al único restaurante del pueblo, la miran y tratan con hostilidad.

Pero una vez realizada y publicada la entrevista, Alex no puede olvidar ese fin de semana en Montseny y menos aún la historia de Silvia. Contra más indaga en el caso, más curiosidad siente. Ha mirado decenas de fotos de Silvia, ha imaginado cómo debía ser de su vida y su carácter, y ha conocido a sus padres, hundidos ambos, aunque especialmente la madre, también a la hermana, Cristina, al novio y a su primo Jan, un joven enigmático y con un gran magnetismo, todo lo cual, hará que Alex no pueda frenar sus ganas de investigar qué le pasó a Silvia aquella noche de verano. Vais a perdonarme que no cuente más de la trama, pues creo que contra menos sepamos de esta vibrante historia más la disfrutaremos. El halo de misterio que la envuelve desde el minuto uno, la ambientación un tanto claustrofóbica y un ritmo imparable, han provocado que no haya podido dejar de leer, se ha colado totalmente en mi subconsciente y solo esperaba el momento de poder ponerme de nuevo con su lectura.

Ese magnetismo se consigue gracias a varios factores. Por un lado una prosa sencilla y directa, a la vez que muy visual, pues continuamente describe el idílico entorno de Montseny, eso sí lo hace con pinceladas que no sobrecargan la trama y que no se hacen repetitivas. Sientes que quieres conocer esa zona cercana a la capital catalana, pero a la vez tan diferente, llena de paz y naturaleza. Pero a la vez, Montseny se convierte en un lugar claustrofóbico, cerrado, con pocos habitantes que miran con desconfianza y, a veces, también hostilidad, a los forasteros. Por otro lado, el uso profuso de diálogo dinamiza mucho la lectura, y también el uso en la narración de la primera persona, le otorga un ritmo y un carácter más intimista que crea verdadera adicción. Los capítulos cortos también ayudan a esa necesidad de continuar leyendo y se hallan encabezados con los nombres de los principales protagonistas, por lo que sabemos desde el punto de quién se nos narrará la historia. Además algunos de ellos también están narrados por la propia Silvia, por lo que nos retrotraemos varios años antes de la desaparición y también a los días y horas previos. De ese modo conoceremos más a Silvia, sus últimos días y sus secretos.

La trama en sí como he dicho gira en torno a la desaparición de una chica. Un tema muy manido en este género, pero con el que la autora ha logrado construir una historia que supura suspense y que logra captar nuestro interés desde un inicio y así hasta el final, algo que no siempre es fácil de conseguir. Me explico. Las dosis de misterio y suspense con las que se arma, los giros y pistas continuas, hacen que el lector se mantenga totalmente enganchado al devenir de una trama oscura, con secretos familiares, un amor prohibido como eje principal y otros sentimientos que hacen que alguien pueda llegar hasta las últimas consecuencias. La autora intenta deliberadamente llevarnos por un sendero en cuanto al culpable se refiere, pero los lectores de este género sabemos que las cosas no son tan fáciles, por ello no debemos fiarnos de nadie. Y es que en esta historia, como veréis, TODOS MIENTEN. Decía pues que la autora trata de que pongamos el ojo en un culpable o en varios muchas veces, engañándonos y haciendo que empecemos a desconfiar de todos.  Y también haciéndonos dudar de si Silvia ha desaparecido por voluntad propia o bien se trata de un asesinato. ¿Y la resolución de la historia? Pues, pese a que me lo estaba viendo venir (cada vez soy más retorcida), le doy un sobresaliente, pues cierra perfectamente todos los interrogantes que se han ido suscitando y el puzzle en el que se ha convertido la trama encaja perfectamente, haciendo que nos sorprendamos y nos quedemos satisfechos con su final.

Para finalizar, El último verano de Silvia Blanch me ha durado un suspiro, y es que he sido incapaz de parar de leer, es por ello, y por todo lo que os he contado antes, que se ha colado entre los mejores libros que llevo leídos este año. Os lo recomiendo muchísimo, y no solo a los que os guste la novela negra, pues se trata de una lectura muy adictiva, que se lee fácil y, sobre todo, tiene calidad. Ah, y por supuesto, Lorena Franco, para mí se ha convertido en una autora a tener muy en cuenta, de momento empezaré por los que ya tiene publicados.

.· puntuación 🌕🌕🌕🌕🌗

ＶＥＲＯ　Ｍ.